Tras todas las manifestaciones, huelgas, protestas, encierros... en contra de la LOMCE han conseguido que finalmente me la haya leído.
Debo ser de los pocos que lo han hecho, fuera del mundo de la educación.
Y que quieren que les diga, lo único que veo es que pide más esfuerzo. Y eso, como suele ser habitual, fastidia.
Se podrá decir que la carga de horas lectivas puede ser diferente, que los recorridos de asignaturas podrían ser de otro modo...pero lo único criticable para la sociedad en general, es la recuperación del esfuerzo, el mérito y enseñar a pensar por uno mismo. Y evidentemente, a la izquierda, estas tres acciones, no les resultan nada positivas. ¿Cómo manipularan a personas con ideas propias? ¿Cómo manipularán a gente que tiene inculcada la cultura del esfuerzo y el mérito?. Es decir, que en una década, dejan de tener representación y se les acaba el chollo.
Si la izquierda quisiera una educación pública de calidad, habría actuado hace tiempo, dados los resultados de nuestros alumnos tanto en informes internacionales como en nuestras cifras de abandono escolar. Pero jamás han salido a la calle en estos más de 30 años con leyes de la izquierda para regular la educación pública.
Les recomiendo que se lean la LOMCE, no es tan larga (unas 50-55 páginas) y juzguen por ustedes mismos. Verán que la totalidad de las protestas son, cuando menos, un poco partidistas.