Aunque a estas horas ya se habrá escrito suficiente sobre la coacción del derecho al trabajo y de movilidad de los madrileños, por parte de los trabajadores públicos de Metro de Madrid, no me puedo contener a dar mi opinión.
Estos sindicalistas, que dicen defender los derechos de los trabajadores se han olvidado que para ellos, debería ser una obligación garantizar que todos los trabajadores puedan ejercer su derecho al trabajo de forma libre y sin coacción. Hoy no solamente han coaccionado a sus compañeros para que no trabajaran, sino que han entorpecido el derecho del resto de ciudadanos a su trabajo y a su libre movilidad.
Pero pobre del que quiera entorpecer su "derecho" a la huelga...enseguida será un fascista, un capitalista un liberal de mierda, etc, etc, etc, etc...
En mi casa me enseñaron que las obligaciones están primero que los derechos, ya que estos te los ganas cuando cumples con tus obligaciones.
Estos sindicalistas no se han ganado ningún derecho, porque ni siquiera cumplen con su obligación, porque lo único que hacen es salvar su propio culo y vivir a expensas de todos los trabajadores.
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